La Fundación Ortega-Marañón es galardona en estos Premios en la categoría de Educación Superior por su trayectoria en la formación académica a través de su Instituto Universitario

La Organización de Estados Iberoamericanos para la Educación, la Ciencia y la Cultura (OEI) celebró este jueves, 19 de junio, en el Auditorio de la Fundación Ortega-Marañón de Madrid, la entrega de los Premios Iberoamericanos de Cooperación para el Desarrollo. Se trata de una distinción que reconoce a personas e instituciones por su destacada trayectoria y compromiso con el desarrollo de la región en ámbitos clave como la educación, la ciencia, la cultura, los derechos humanos y la integración regional.

En esta primera edición de los premios, anunciados este marzo, fueron reconocidas más de veinte personalidades e instituciones de trece países iberoamericanos. Entre ellas, ocho galardonados se hicieron presentes en Madrid para recibir su medalla y certificado en representación de Argentina y España:

En la categoría de Educación y Formación Profesional, fue distinguido Gerardo Martínez, secretario general de la UOCRA, por su trabajo sostenido en la capacitación de trabajadores y su impulso a la formación como motor de inclusión laboral. También recibió el galardón la Fundación Entreculturas – Fe y Alegría, representada por su director Martín Iriberri, por su labor educativa transformadora en contextos de alta vulnerabilidad a través de proyectos comunitarios.

En la categoría de Educación Superior, la Fundación Ortega-Marañón, anfitriona de la ceremonia y representada por su directora Lucía Sala, fue reconocida por su destacada labor académica, su promoción de la cultura humanista y su estrecha relación con América Latina a lo largo de su historia.

En la categoría de Educación y Productividad, fueron premiados José Urtubey, abogado y director de Celulosa Argentina, por su compromiso con la articulación entre el sector privado y la educación técnica como camino hacia un desarrollo más equitativo; y Marcelo Figueiras, presidente del laboratorio Richmond, por su impulso a la innovación, la producción nacional y el fortalecimiento de la relación entre ciencia, educación y empresa.

En la categoría de Educación en Derechos Humanos, Democracia e Igualdad, fue premiado el padre Ignacio “Nacho” Bagattini por su trayectoria en defensa de los derechos humanos y su trabajo territorial con comunidades vulnerables, promoviendo la inclusión educativa y social.

En la categoría de Cooperación Regional, se entregaron distinciones a Christian Asinelli, vicepresidente de Programación Estratégica del banco de desarrollo de América Latina y el Caribe (CAF), por su rol clave en la planificación de políticas públicas regionales de integración; y a Amador Sánchez Rico, diplomático y actual embajador de la Unión Europea en la Argentina, por su labor sostenida en el fortalecimiento del diálogo y la cooperación entre América Latina y Europa.

La ceremonia contó con la presencia del secretario general de la OEI, Mariano Jabonero, quien recordó que este premio busca «reconocer a aquellos y a aquellas que han contribuido a este proceso de construcción positiva de la OEI en la cooperación regional, porque esto no se hace solo». También estuvo presente el secretario de Estado de Educación de España, Abelardo de la Rosa, quien reconoció la «doble función» del premio: «reconocer trayectorias, méritos y avances» y mostrar «que la OEI marca un modelo», así como el secretario general de la SEGIB, Andrés Allamand.